Buscando las primeras lisas del Quequen Salado

Las lisas del Quequen Salado

El día domingo 30 de Agosto a las 5 de la mañana estábamos saliendo de Tandil junto a Cupe en una hora y algo llegábamos a Adolfo.G.Chavez a buscar a el Vasco y Tiburonero para completar en cuaterno de pescadores y este ultimo tratar de entrar a las ligas mayores si conseguía una lisa.
A las 7 y algo estábamos en La Cueva del Tigre dejamos el auto y con los equipos comenzamos la larga caminata hacia el pesquero que el Vasco tenia marcado.

Luego de recorrer unos dos mil metros y de disfrutar el paisaje de este milenario e imponente río llegamos a una curva donde pudimos bajar la barranca y hacer base al lado del agua sobre unos playones de piedra, enseguida vimos algo de actividad de lisas, el primero en acusar un pique fue el Vasco, alcanzo a arrimarla a la orilla y no la pudo contener, pero con esto ya sabíamos que no estaba errado el dato, las lisas estaban y además picando!!
Tuvimos unos piques más pero la falta de taiming hizo que erráramos varios piques,hasta que aparecieron los bagres enormes que comenzaron a molestar y luego de que el Vasco saque cuatro  decidimos cambiar de lugar para ver si encontrábamos el grueso del cardumen.

No sin antes escalar con todos los bártulos una barranca llegamos a una zona ancha de profundos veriles donde el espectácul.. de tanta lisa saltando tensaba los nervios al mirar las boyas enfrente había muchísimos liseros con varias capturas de la mañana, aunque la mayoría coincidía en que el buen pique se daría por la tarde siempre y cuando calentase el sol como había pasado en los días anteriores.
Probando a distintas profundidades tuvimos algunos piques no muy francos y varios yerros por culpa en parte de la correntada en bajante y el viento en sentido contrario.

Hasta que llego la primera.La primera lisa para Tiburonero luego con el rió lleno salieron algunos pejerreyes y la actividad de lisas disminuyendo y los liseros de la zona retirandose, así que decidimos regresar a la cueva del tigre a tomar unos mates, acomodar las cosas y emprender el regreso con la satisfacción de saber que las lisas ya están picando y si el clima acompaña con poco viento y bastante sol tenga la seguridad que va a hacer una muy buena pesca.